domingo, 29 de marzo de 2009

MP Bistro



El viernes pasado fui con MO al MP (Mónica Patiño) Bistro. Después de una hora en el tráfico llegué a Andrés Bello, calle entre Campos Elíseos y Reforma donde se encuentra este escondido lugar. Está casi a espaldas del Hotel Presidente, al topar con pared.


La cocina es sencilla, con influencias francesas y mexicanas, principalmente. Hay cosas para todos los gustos, por lo que tardamos un poco en decidir qué pediríamos. Para empezar, al centro, un carpaccio de atún sazonado perfectamente. No hacían falta las tostaditas con que venía acompañado para comerlo, solo era una delicia. También pedimos unos wontons de cacahuate que, por desgracia, dejamos de lado hasta terminar el carpaccio y acabaron un poco fríos; aún así, estaban bastante ricos. Yo pedí una crema de elote que cubrió mis expectativas y mi antojo.


De plato fuerte MO pidió un pescado del día bastante bueno pero que no competía con mi extraordinario osobuco. La carne sumamente suave y jugosa, como para pedir uno más... El pescado traía un poco de alcachofa al ajillo que creo que era lo mejor del plato, por lo que pedí que me regalaran un poco en un platito aparte (por suerte creyeron que no era para mí).


Con la lista de postres llegó nuestro mayor problema: ¿qué elegir? Ella escogió un pastel rarámuri -creo que sí era ese el nombre- cuyas ganancias sería destinadas a comunidades indígenas. Pastel de chocolate con nieve de guanábana y cognac. Yo me vi obligado -literalmente- a pedir un souffle de chocolate con nieve de frutos rojos. Riquísimo, aunque creo que lo supera el de Le Cirque.


Todo esto acompañado por un Carmenere de maravilloso aroma. Tienen una buena selección de vinos mexicanos y extranjeros, no muy vasta pero buena. Yo terminé con un oporto, que llegó demasiado frío para oler a algo, aunque poco tiempo después llegó a su temperatura ideal. Mi acompañante, por su parte, mezcló un poco de todo: un "martini" de frutos rojos, vino, cognac y, por último, una probada de mi oporto.


Un lugar muy recomendable. El costo promedio por persona debe rondar los 400 ó 500 pesos. Los platos llegaron tibios y no calientes -no así la comida-, lo que refleja la tardanza que puede haber en el servicio, aunque no llega a niveles graves ni desesperantes.

2 comentarios:

Mariana O dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
viajeacanada dijo...

me encanta este restaurante y admiro a Mónica. En mi canal de youtube (viajeacanada) tengo varios videos interesantes de un viaje que hizo Mónica a Canadá donde nos cuenta sobre unos viñedos que conocio, platica con chefs sobre producción local y comida organica, etc.